La Cámara
BREVE HISTORIA DE LA CÁMARA
(Extraída de la conversación del Dr. Falcon con Edith Cassidy, en los salones de La Cámara, en Tyr)
- ¿Qué pensaría si le digo que toda la mitología que conocemos de pueblos remotos no es fantasía sino realidad?
- Pensaría que su golpe en la cabeza y la emoción de su descubrimiento le ha confundido el cerebro.
El hombre soltó una carcajada alegre.
- Tiene sentido. Es lo que nos han enseñado a creer. Es lo que en este preciso lugar se acordó difundir y es lo que debemos creer para que la vida humana y el mundo sumergido puedan convivir en paz.
- ¿Dice que es resultado de una propaganda estudiada el que no creamos ya en cuentos de hadas?
- Exacto. ¿No le parece extraordinario? Una maniobra maestra. Durante cientos de miles de años, la humanidad ha convivido con criaturas que consideraba sobrenaturales, pero que han formado parte de su historia y su evolución, ocupando los mismos espacios, participando de la vida cotidiana… todas las culturas tienen sus seres extraños que ahora consideramos mitológicos, meras creencias de pueblos con menos cultura y menos inteligentes que nosotros, pero ese planteamiento es profundamente erróneo. ¿Por qué eran menos inteligentes los celtas que convivían con los seres del bosque? Ahora decimos que «creían en espíritus» pero ¿y si esos espíritus realmente estaban allí? ¿Y si no eran simples espíritus, sino criaturas tangibles? ¿Y si no es que «creyeran» sino que los veían y hablaban realmente con ellos? Los vampiros existen, doctora. Los cambiapieles existen. O al menos existían para el ser humano cuando empezaron a forjarse esos mitos… piénselo. A lo largo y ancho del mundo: todas, absolutamente todas las culturas humanas hablan de seres sobrenaturales… y de pronto, ya no están. ¿No le parece extraño?
- Aún hay gente que cree que dejando presentes a los leperchauns conseguirán sus cuencos de oro, las tradiciones siguen vivas en algunos pueblos más aislados.
- Eso tiene la misma justificación que el hecho de que no tengan televisión por cable a esos sitios. La propaganda de La Cámara no ha llegado a ellos, así que no han podido adoptar esa nueva corriente de pensamiento que hace que el ser humano, sencillamente, no crea en lo sobrenatural.
- Está hablando del ser humano como un ente único, en base a su concepción europeísta y moderna del ser humano, profesor. Los seres humanos que yo he estado tratando estos meses en mi campamento, siguen creyendo en djinns y en espíritus de la arena.
- No me quiere entender, doctora. El individuo también cree en dios, en el destino, los dioses hindúes o que la tierra es plana. Sí. Pero el pensamiento generalizado, a nivel comunidades enteras, es dar por sentado que lo sobrenatural no existe. Que es superstición, tradición o herencia. Algunos creen que hay cosas inexplicables, sí, pero no le dan mucha importancia o se conforman con explicaciones de sus ancestros sobre espíritus o deidades a las que es mejor no molestar… y no lo hacen. No las molestan. Crean en ellas con mayor o menor firmeza, tienden a respetar su espacio y evitar interactuar… ¿ve por dónde voy? Todo forma de un plan maestro para dividir ambos mundos…
- ¿Como una conspiración global? ¿Y quién la ha orquestado? ¿Qué mente privilegiada decidió que eso era de algún interés?
- Precisamente aquellos a los que nos empeñamos en olvidar, doctora. Aquellos que creemos ahora inexistentes y fruto de una locura colectiva de nuestros antepasados…
- ¿Las hadas?
- Las hadas, los genios, los vampiros, los licántropos… incluso los magos. Sí, doctora. Magos, hechiceros, verdaderos manipuladores de esa magia en la que ahora nadie cree. No hablo de ilusionistas de función, sino de magos capaces de milagros como los mentados en la biblia cristiana, como los que se atribuye a los chamanes africanos, capaces de convocar las tormentas… magia auténtica.
Edith se rascó la barbilla, lamentándolo de inmediato al abrirse de nuevo el corte de la mejilla. Eso la hizo rechistar dolorida.
- Pongamos que le creo. Supongo que su conspiración de criaturas mágicas se reunió aquí a decidir tan exquisita maniobra, ¿no?… ¿En qué idioma hablaban? ¿Todos en inglés? ¿En turco? ¿Algún faraón egipcio con cara de chacal que impusiera su lengua en las negociaciones?
- Sé que es complicado, doctora. Pero piénselo… ¿por qué le cuesta tanto creerlo?
- ¿Por qué? ¿Las naciones unidas no consiguen ponerse de acuerdo casi ni en el color de la bandera y debo creer que un cortejo de criaturas de fábula, procedentes del mundo entero, decidieron entre todos hacernos olvidar su existencia? Vamos, profesor… un poco de coña sí que parece, ¿no?
- Los acuerdos de La Cámara no surgieron de la noche a la mañana, doctora. A lo largo de siglos y siglos intentaron ponerse de acuerdo infructuosamente… verá, el concepto de La Cámara se remonta unos siete mil años atrás, sí, no es una cifra descabellada. Tómeselo como una clase de historia. Sueñe conmigo, si prefiere considerarlo solo un cuento… allá por el cinco mil antes de nuestra era, si no antes, un grupo de líderes de distintos pueblos no humanos decidieron reunirse y comentar el problema de la humanidad: Unos tíos que empezaban a guerrear demasiado entre sí y a reproducirse en exceso. Antes de ese momento ya existían culturas humanas, no crea… por todas partes hay restos de culturas ancestrales: la cultura de Ordos en Japón, la magosiense en África, o la Angara en la India están datados en torno al treinta mil antes de Cristo. Se sabe que Göbekli Tepe se construyó hará unos trece mil años y hubo asentamientos ganaderos y agrícolas ya hace diez mil años… pero entonces éramos pocos aún, muy desperdigados. Las diversas especies humanas que poblaban la tierra apenas tenían alguna influencia en el desarrollo del mundo. Apenas parte del paisaje… El resto de, llamémoslos pueblos, que vivían en este mundo, no estaban demasiado preocupados por nosotros. Para algunos éramos incluso parte del menú, no les molestaba nuestra presencia… pero entonces empezamos a crecer y expandirnos. Empezamos a comerciar con manufacturas, a perfeccionar las técnicas de caza, no solo de criaturas de las que nos alimentábamos, sino de criaturas que de alguna forma nos inquietaban… y resultó que el ser humano, además de tener creatividad para la alfarería y los tejidos, tenía una especial habilidad y destreza para la guerra, las matanzas y la destrucción. Sí, contamos con que la característica básica del ser humano es su misericordia y solidaridad, pero no nos equivoquemos, lo que realmente ha definido la historia de nuestros pueblos ha sido la guerra, la ley del más fuerte y la crueldad. Pero volvamos a la historia, a ese remoto momento en que unos seres no humanos, de distinta naturaleza, deciden reunirse por primera vez y poner sobre la mesa la necesidad de organizarse un poco. Hay un bando llamado humano que ataca indiscriminadamente a todos los demás. Los demás tienen también sus propias rencillas, seguro, sus luchas territoriales, sus conflictos… pero el nivel de desarrollo bélico que empieza a tener el hombre les inquieta. Por supuesto, todavía no es su problema principal. Algunos hombres veneran a algunos de esos grupos de seres primigenios. No hay acuerdo sobre qué hacer con ellos, pero se establece un cónclave de sabios, la semilla de una institución que ha llegado hasta nuestros días como «La Cámara». En realidad, su nombre no era ese, sus miembros conocían aquel encuentro sencillamente como «la unión», pero la forma en que fijaron por escrito las conclusiones de aquel evento, parecía pronunciarse «Kmra» o algo así y fue derivando en distintas lenguas a «Cámara»… ¿No le parece fascinante?
Edith escuchaba embelesada, aunque al desviarse el profesor en cuestiones lingüísticas, tan emocionado como con el resto de cosas, la mujer arqueó una ceja escéptica y el hombre volvió a su línea, sonriendo. La doctora pensó que tenía una sonrisa agradable, muy efusiva.
- El caso es que la Cámara se ha establecido. Sus miembros llevan bastante ventaja evolutiva y cultural a sus contemporáneos humanos y se empieza a barruntar la posibilidad de escindirse de alguna forma de esa prole de bípedos desproporcionadamente fértil, pero los acuerdos son lentos y tienen otros problemas raciales que tratar entre sus propios miembros. Se busca la adhesión de todos los no humanos a ese proyecto de institución, cosa tampoco fácil, y van afrontando sus propias dificultades en su afán de crear, si no un Estado no humano, al menos sí un cierto órgano de control y coordinación que ayude a todos a repartir cierto orden en el caos reinante… mientras tanto, el ser humano va creciendo en poder y habilidades, surgen las primeras culturas que podemos considerar como tales: Mesopotamia en Oriente Próximo, Cishan en China, los pueblos del Indo, el Nilo, los asentamientos de Sudamérica… Y se dan algunos siglos de exploración mutua. Los avances humanos intrigan al resto de pobladores. Aún no resultamos suficientemente preocupantes… pero habrían de llegar las sociedades realmente jerarquizadas, las dinastías egipcias, los reyes sumerios, la civilización minoica… y la mutua admiración empezó a dar paso a mutuo temor y las relaciones entre unos y otros empezaron a estropearse de verdad. El ser humano perfecciona el arte de la guerra y la muerte de formas nunca antes vistas. Unos mil años antes de nuestra era se crea la Hermandad de Asesinos, una institución de origen humano que desarrolla una discreta facción especializada en asesinar a seres no humanos. No hablo de dar caza, hablo de asesinar. De muertes deliberadas, planificadas, casi… refinadas. Y los sabios no humanos descubren que su integridad y sus secretos corren peligro y deciden reunir una nueva Cámara que pueda proteger sus intereses, sus formas de vida y el conocimiento de otras facciones sobre las formas de darles muerte… entonces empieza a tener peso La Cámara como institución, aquello que parecía una simple reunión de unos pocos, se convierte en un símbolo de unión y protección, y consigue suficiente fuerza como para negociar con La Hermandad y sus asesinos especializados, con ánimo de absorber esa facción e incorporarla a sus filas como una suerte de guardia de los clanes a los que representa La Cámara… no está muy claro que erradicaran esa facción, pero sí que se crea a partir de entonces una estructura más sólida para salvaguardar los intereses que representa ese concilio de seres no humanos. Mientras buda predica, los chinos combaten y los romanos crean el cargo de dictador, la cámara cobra fuerza aunando la voluntad de permanecer de todos los que dentro de ese otro mundo, no humano, pueden considerarse grupos consolidados… sean reinos, familias, clanes, tribus, naciones… si juran respeto a la Cámara y aportan sus conocimientos y sus juramentos de protección, se les admite en el consejo… en este consejo en el que estamos, doctora… imagine aquí sentados, reunidos como en una junta de la ONU a magos de diversas procedencias, vampiros, hombres lobo, genios, hadas, elementales de tierra o aire, duendes, sirenas, sílfides… ni en las películas más locas y fantásticas de la era moderna podrían reunir un elenco así de variopinto. El tiempo pasa y Alejandro Magno conquista medio mundo. El ser humano ya no es una broma. Tras él, Roma se expande de forma brutal, imponiendo su pensamiento y aplastando los vestigios de aquellos que aún convivían con los moradores originales de sus tierras. Así que la Cámara se reúne de nuevo, esta vez no aquí, sino en Ostia. El imperio romano está un poco en declive, con batallas constantes, y los clanes aprovechan esta época convulsa para introducir sus propias maniobras…
- ¿Está diciendo que esos clanes tuvieron algo que ver en la caída del Imperio Romano? Eso sí que es de locos.
- ¿Por qué no? Hay tantas lagunas de la historia que desconocemos… ¡y aún no hemos llegado a la Inquisición y la quema de brujas!
Los dos se volvieron a la vez, alertados por un ruido en un lateral de la inmensa sala y enfocaron con sus linternas a la densa oscuridad. No hallaron nada.
Fragmento extraído del libro: «El Arqueólogo. Profesor Falcon«
cuyas primeras páginas pueden leerse en el Blog
OTRAS REFERENCIAS A LA CÁMARA:
– Glifos de las Instituciones (Codificación de La Cámara. Archivos)
– Hitos relevantes en la historia de los Clanes (Archivos)
– En todos los libros de los Clanes Sumergidos se hace alguna referencia a esta institución